lunes, 17 de octubre de 2011

Adiós indefinido

Escribo esta entrada para despedirme de una forma, de momento indefinida, de todo el mundo. Quiero que sepais que aunque no comento en los blogs, leo todos y cada uno, como antes hacía, pero no voy a escribor un comentario sin saber realmente ni lo que pienso en estos momentos de mi.
Esta última entrada la escribo con rabia, mucha rabia. Como muchos leistes anteriormente, me gusta darle vueltas a las cosas, pero esta vez les he dado una vuelta definitiva y sin retorno. Mirad, hace poco, me propuse cambiar de actitud, valorarme más, relacionarme más... y un larguísimo etcétera. Pero mira, van pasando las semanas y mi actitud habrá cambiado si, pero mi jodida suerte no. Ya dije hace tiempo, que soy cristiano, y practicante, aunque no de ir a misa, si no de ir a la iglesia a rezar en silencio, me parece mejor, aunque este no es el momento de hablar de ello. Os lo voy a decir así, últimamente me cuestiono seriamente mis creencias. Muchos, después de leer lo que viene a continuación dirán: ...." Claro.. esque eso es ser religioso por interés...". Al que piense eso le diré que no tiene ni puñetera idea. Empiezo desde el comienzo. Cuando tenía siete años, mi madre tuvo una operación muy delicada del corazón que casi le cuesta la vida, yo, con siete años, rezaba a Dios para que la ayudara y siguiera conmigo en casa. Por suerte, he disfrutado de los últimos once años con mi madre, y espero que sea así siempre, y en esos momentos, achaqué la ayuda a Dios, y por ello, le prometí un pago, un sacrificio personal. Prometí ayudar a todo el mundo, no buscar en lo que hacía un interés personal y por supuesto, agradecer las cosas buenas y todo lo feliz de mi vida a Dios. Y exceptuando algún que otro momento gilipollas, así he hecho siempre. Pero en el fondo miento si creo que Dios me ha ayudado alguna vez de verdad. En el colegio, concretamente desde los 10 años, yo estaba como una puta bola de gordo y todo el mundo se metía conmigo. Cuando llegaba a casa llorando y con ganas de morirme, pedía explicaciones a Dios, y sabeis quién me respondía ?, A ver quién adivina ?, nadie. Cuando me sentía así, no se lo contaba a mis amigos, ni a mis padres ni a nadie, porque lo que sentía, ellos no lo podían saber ni entender. Por estar así de " fuerte " según decían ( fuerte no, gordo ), me pasaba los partidos de fútbol, sentado en el banquillo, eso si, me sacaban para el pitido final eh, para que me sintiera realizado-, a pesar de que era el que más entrenaba. Luego me dio por el baloncesto, se repetía la historia, solo que esta vez con camiseta sin mangas. Aunque bueno, el lanzar y coger la botella era muy entretenido. Ya de chicas no hablamos... tema aparte. Decidí cambiar, y perder peso, y no fue por salud, sino para que toda la panda de anormales del colegio se dejara de meter conmigo. Hice una dieta y mucho deporte, y conseguí en tres años bajar de 101 a 73 que peso ahora. Sabeis qué era lo único que me ha animado en los últimos años ? El baloncesto. Me tiraba horas y horas jugando en un gimnasio, yo solo, practicando y practicando. No me enfadaba el suspender un exámen, el no de una chica ( que con el tiempo y la reiteración te acabas acostumbrando ) o una discusión con mis padres; lo que me enfadaba de verdad, era hacer un día un mal partido con mis amigos, ya que al baloncesto es a lo que dediqué todos mis esfuerzos.
Cuando acabé el colegio y mandé a tomar por... a todos los payasos del colegio, entré en la universidad. La verdad me gustó mucho, gente nueva ( que importante, no me conocían de nada ), y nuevo rollo. Estaba contento, la gente me decía que era delgadito y que estaba bastante bien y por primera vez en mi vida me subió de nuevo algo la autoestima. Además, en el primer cuatrimestre, aprobé todas, me saqué el carnet, me dijeron de ir a entrenar con el equipo de baloncesto de la universidad ( el 2º, pero estaba muy orgulloso )... etc. Parecía que un cambio era posible. Pero... y aquí es cuando digo que si existe el Karma creo que el cabrón se ha equivocado porque me cargado la cuenta de media banda de Al-Qaeda; Todo cambia. El episodio cúlmen ya lo sabeis, y más que nada fue la causa de comenzar a escribir aquí ( un error claramente ), asique me centro en lo que vino después. A partir de ese momento, estaba hecho una jodida mierda, de forma que ni el baloncesto conseguía que levantara cabeza. Estuve así tres meses, casi coincidiendo con los exámenes del segundo cuatrimestre, que menos mal que me di cuenta a tiempo y consegui aprobar todas, porque si no... igual no estaba escribiendo ésto ahora. En esos tres meses, mis conversaciones ( Monólogos ) con Dios se multiplicaron, pidiendo explicaciones por muchas cosas y toda la respuesta que obtuve fue un rotundo silencio, solo mancillado por el carraspeo de alguna viejecilla en la iglesia rezando el rosario. Pero de nuevo, intenté tirar para adelante, a pesar de que el saco de mierda pesaba cada vez un poco más, pero bueno, a tirar. Me propuse para el verano lo de siempre, a valorarse más. Me he pasado un verano de gimnasio, intentando conseguir un cuerpo más atlético y mejorar en baloncesto, que tanto apoyo psicológico me ha dado. Y bien. He hecho con un amigo un equipo de baloncesto para jugar y sabeis qué ?, es a día de hoy de lo que me siento más orgulloso de toda mi vida. El otro día jugamos un partido, y cuando metí un triple y me aplaudieron, suena triste, pero fue el momento más bonito que recuerdo y la única vez en muchos años que me he sentido verdaderamente feliz. La gente con la que estoy en el equipo, aunque los conozca de apenas unos meses, son de las personas más importante para mi, porque con ellos, me siento por primera vez dentro de un grupo donde me respetan y no se ríen de mi.
Y respecto a mi, qué debería hacer ?. Mandar a la mierda mi actitud de los últimos años respecto a los demás ?, es lo que hace todo el mundo, barrer si parcela y al resto que les jodan, igual debería hacer lo mismo. Por ejemplo, si el vecino del 2º no me devuelve los buenos días, que le jodan, si no me apetece subir a diario al trastero, que se jodan, si me harto de ser el gilipollas que va a clase y que deja los apuntes a todo el mundo sin pedir nada a cambio, pues no se los dejo, que se jodan, si veo un indigente pidiendo, que se joda... y podría seguir, pero no quiero. Intento portarme bien con todo el mundo y qué recibo ?
Nada, esa es la respuesta. Nadie me ha ayudado a mejorar en baloncesto, nadie me ha ayudado a peder peso, nadie me ha ayudado a conseguir a la chica que me gustaba y nadie me ha ayudado a nada. Y tengo que seguir dando gracias por ello ?. De seguir así, no por mucho más.