jueves, 30 de junio de 2011

Trenes




Hoy se fue el que vino




y no se si querrá volver




dice que olvidó el camino




no se quiere perder








Se desespera en el sofá




deseando estar ocupado




para no pensar en el pasado




que tanto le hace llorar








Desengaños caducos




se lamenta por no ver




lo que una vez pudo




y nunca llegó a ser








Triste y efímera existencia




vive para el olvido




sin pensar en lo perdido




masoca sin conciencia








Abatieron sus alas




a golpe de balas




desde los oscuros trenes




que perdió en el andén.




lunes, 27 de junio de 2011

Empezar a vivir




Hoy me ha dejado de doler




la cabeza, harta de pena




creo que te he dejado de querer




y de pasar las noches en vela








Ya no había más curas




para evitar que me doliese




mal remedio que tienen las dudas




y los conflictos de intereses








He entendido que la verdad




es para muchos la viga




que sustenta la realidad




y a grandes rasgos sus vidas








Ahora se que olvidarte




hubiera sido una suerte




el problema es el de quererte




así, y tan ciegamente








Aún aborrezco la falsedad



por mucho que me duela




comparto cuarto con la soledad




y un par de almas en pena








Se acabó ya el sufrir




y de soñar con lo que no hubo




prefiero empezar a vivir




al día y cada minuto.




sábado, 25 de junio de 2011

En el asiento de atrás del coche

Poco es el beneficio
de la inversión en penas
él vive en vida ajena
y lo hace ya por vicio

Pide puesto en el mercado
vende baratos sus sueños
pues al no tener dueño
hace trueque por pecados

Existe atado a la ilusión
que le enajena sin saber
lo muy agudo del poder
que firme asía su razón

Y dio importancia
al especial sabor
de ese beso con amor
que grabara la memoria

Ahora ve igual de dulce
un primero con amor
que el confuso por alcohol
en el trasero del coche


viernes, 24 de junio de 2011

Alcohol



Una vez los rayos del sol amenazaban por encima de los rojizos tejados de las casas con salir, intenté recordar el cúmulo de situaciones que componían el mosaico de la noche pasada. Eran retazos sueltos, ya que muchos se habían disuelto con el alcohol ingerido, dejando paso a una negra cortina que me impediría recordarlos hasta no despertar al día siguiente. Recuerdos de alcohol, risas y abrazos; besos ajenos y falsas confesiones de afecto, nunca antes profesadas en un estado sobrio. La sinceridad demostrada con alcóholica facilidad, no había servido, una vez más , para nada. Las penas seguían superando ampliamente el escaso número de alegrías; seguía sin poder compensar la balanza. Y sentado, al día siguiente en el suelo del baño, fui consciente, de nuevo, de que la falsa seguridad que provoca el alcohol en quien lo ingiere, no arregla nada, en todo caso, empeora una ya caduca situación. Acabas rebajándote una vez más, y ni el sentimiento de lástima que provoca tu ya de por si, triste imágen de un borracho, ni las palabras de amor que dificultosamente balbuceas, cambian nada.


El problema, es darse cuenta una vez pasada la noche, y no antes... .

lunes, 20 de junio de 2011

adiós



Hoy la abuela no ha venido a buscarme a la parada; no me ha traído el bocadillo y nadie me ha dado un beso al bajar del autobús. En lugar de eso, ha venido mi hermana mayor, que si, me ha dado un beso, pero no es lo mismo. Al llegar a casa, tampoco estaba la abuela. El abuelo, estaba sentado en el sofá del salón, cabizbajo con la mirada perdida, buscando algo inexistente en el frío parquet. Mi madre, abrazaba a papa, mientras que mis tías hablaban por teléfono ..... A sido derrepente, no sabemos nada..... . Yo no entendía nada. Me fui a mi habitación a jugar; pero no se, era extraño; sin la abuela, era diferente. Mi madre se acercó ..... la abuelita se ha puesto mala L., y papa y yo vamos a ir a ver cómo está. Pero no te preocupes... que se pondrá buena muy pronto... .



Mentira. La abuelita, no estaba mala, no se puso buena en una semana, dos, tres... . Ya nunca volvió a jugar conmigo, ni a traerme el bocadillo a la parada del autobús, ni mucho menos a recibirme con una sonrisa. Y se fue así, sin avisarme. Al principio me enfadé cuando me dijeron que la abuela se había ido. Unos años más tarde, comprendí por qué no puedo venir a despedirse cuando se marchó.

jueves, 16 de junio de 2011

Diva de mampara



- Play- Comienza la felicidad. El simple gesto de presionar el botón de inicio, arrancaba en ella una oleada de sensaciones. El escenario estaba ya preparado: el agua caliente, pero sin pasarse mucho, la puerta del baño cerrada para que su hermana no se quejara del alboroto y la toalla colgada sobre la mampara, para no cojer frío al salir. Y.... empezaba el espectáculo. Con la alcachofa de la ducha a modo de micrófono, esperaba impaciente a que comenzara la intro de la canción. A pesar de estar curtida en miles de actuaciones, se sentía una novata con el tembleque de las piernas. Pero una vez que empezaba a cantar, se olvidaba de todo. La chica de dieciocho años y sus problemas esperaban tras la puerta del baño; dentro, ya no era Marta, si no quien ella quería. Los días felices Eva Amaral, Tylor o cualquier otra; para los días un poco más complicados, Tina Turner no iba mal; y los días en los que se veía con ganas de rock, hacía los coros de Kiss o Queen.



Y esos veinte minutos eran los más maravillosos del día, hasta que su madre le recordaba la tarifa de agua caliente que pagaban al mes, ahí, se acababa el concierto.

miércoles, 15 de junio de 2011

Circular



Nada más levantarse, escribía en un papel cómo se sentía esa mañana; y lo repartía entre sus amigos, vecinos y conocidos a modo de circular. Todo el mundo sabía cómo se encontraba a diario. Si en la cafetería era bueno servirla un poco más de leche en el café, una magdalena más; si en el super debían poner el helado de chocolate en oferta o si no era el mejor día para declararse con ella.



De esta forma, los días grises, parecían menos grises y los felices lo eran mucho más. A veces, no estaría de más seguir la misma estrategia o prestar más atención a las circulares de otras personas.

lunes, 13 de junio de 2011

me limpias el bigote ?




La gustaba mirarse al espejo nada más acabar de tomarse el café. Se sentía feliz con ese bigote de espuma que nacía en las comisuras de su boca, allí donde los labios rojizos tomaban contacto con el cálido tacto de la taza; y que cosquilleaba su nariz. Esperaba impaciente el sonido de la puerta, anunciando la llegada de él, su prototipo ideal de chico; aquél que sin mediar palabra, la borraría el bigote con un profundo beso. Al darse cuenta de que soñaba sola, bajó por las escaleras hasta el cuarto piso ( el vecino del quinto besa peor ), y llamó. ¿ Me limpias el bigote por favor ?

viernes, 10 de junio de 2011

Subrayados



- Hola !, ¿ Qué haces ?



- leyendo, ¿ No me ves ?



-Pero.... ¿ Porqué lees palabras salteadas ?



-De verdad, estás ciego, fíjate. Solo leo las palabras que están subrayadas; esque es el libro que ella deja todos los martes en la biblioteca, como acordamos



-Oye.... no hay ninguna palabra subrayada....



-¿ Cómo que no ?. Mira... aquí subrayó te, aquí quiero, aquí beso....



-...... Los siento pero..... no hay nada subrayado. Es un libro de matemáticas



-¿ Qué? No, no es posible. Pero si antes estaban.... Me estoy vlviendo loco



-No, loco no. Es solo que la misma sombra del carboncillo que oscurece la base de tus palabras de amor, es la misma que no te deja ver bien la realidad.

lunes, 6 de junio de 2011

Alas en la espalda




Todavía recuerdo la noche en la que se escapó por la ventana; volando con esas pequeñas alas tatuadas en su espalda. Sabía que debía hacerse ese tatuaje, algún día le serviría para escapar de aquí. Se despidió de mí como siempre, sin un beso, siguiendo su estilo; y se marchó así, con lo puesto. No quería perder el tiempo llenando la maleta de cosas inútiles que solo incrementaban el peso. Yo me quedé sentado en la cama mientras que veía como se alejaba rápidamente, sin mirar atrás. Contaba con los dedos de las manos todas las sonrisas que me debía la suerte pero me quedé si dedos, por lo que empecé con los de los pies; pero también se me acabaron.




¿ Quién me presta los suyos para seguir contando ?

sábado, 4 de junio de 2011

Cómo cambian las cosas



- Hola señorita; ¿ Qué hace ?



- Estoy improvisando besos; ¿ Quiere uno ?



- Mmm no se, pero... para dar un beso... ¿ No hace falta sentir algo por la otra persona ?



- ! Que va ! eso era antes, ahora se dan así, sin más. Espere, que le doy uno y va practicando



- Oh ! Me he convertido en un antiguo, y eso que todavía no he cumplido ni los veinte. Tendré que adaptarme a ello, qué remedio....

jueves, 2 de junio de 2011

Minas anti-afecto

No rodees tu corazón
con minas anti-afecto
pues tengo el defecto
de lanzarme sin pensar
en el motivo o la razón

Levanta la barrera
no me importa la aduana
frágil cual porcelana
que no conseguirá detener
mi ciega carrera

Como kamikaze me lanzo
contra el marcado objetivo
en un sacrificio altivo
que a pesar de lo sufrido
creo que no alcanzo

No lo hice ayer, pero si ahora
busco la alternativa
para no gastar la vida
intentando conseguir
el premio que atesoras

Ya no voy a esperar
he perdido el tiempo
y aunque tuve mi momento
para conseguir lo que quería
no lo supe aprovechar.

Confesiones a mi psicólogo de barra

Cómo resumiría yo hasta ahora mis historias " amorosas " ? . Pues muy sencillo, en una sola frase: " Me sacaban la lengua en lugar de enseñarme a besar ". Palabras de Joaquín Sabina en su increíble canción de viudita de Clicquot. Y es que es realmente así. Hasta hace poco, achacaba mis " fracasos amorosos " a mi forma física. En defensa de mis retractores sobre esta última idea, he de confesar que la concepción que tenía de mi mismo, hacía que no me aventurara a intentar nada con ninguna chica y a no salir nunca, ya que me atrevía a adivinar la respuesta que me darían ante una posible intentona. Decidí cambiar, y mentiría si digo que fue por salud, por que no es verdad, la razón del cambio, radica en la idea de que el cambiar sería paralelo a un aumento de posibilidades. Además, este año empezaba la universidad, lo que significaba entrar en contacto con gente que no me conocía de nada y el de tener un rol totalmente diferente al que tenía en el colegio. Mientras que a la gente le daba pena dejar el colegio, yo, el día de mi graduación, daba saltos de alegría porque no veía el momento de marcharme de allí. Al irme, no solo dejaba el colegio, sino todo aquello que yo había sido y vivido en ese lugar. En la universidad conocí a gente que consiguieron que cambiara un poco la concepción que tenía sobre mí. Incluso se me presentaron oportunidades para solucionar " mi problema " pero, siendo un tanto egoísta pensaba que no me valía cualquiera ( concepción estúpida de la que me percaté más adelante ). Me empezó a gustar una persona, de la que no niego que me encoñé, demasiado incluso, y animado por las esperanzas de amigos y de mí mismo, se lo hice saber. Pero..... a pesar del cambio, no cambió nada, bueno, igual la forma de hacerme saber que no era recíproco, por lo demás, el concepto era el mismo. Confesaré también que esta vez me jodió más que otras, porque me gustaba de verdad y no sé, me vi con más posibilidades... en fin, de ilusiones vive el hombre. " Ye lo que hay " diría mi abuelo. No se le puede pedir a alguien que sienta por ti lo que en verdad no siente y eso tú no lo vas a poder cambiar ni por todo el oro del mundo.

miércoles, 1 de junio de 2011

La Oca












Qué es la vida, sino una oca




tiro, y no consigo saltar




a la casilla de avanzar




pero lo hago, aunque no me toca









Siempre caigo en el puente




e intento, como pez




remotar la corriente.




No es la primera vez









Y sigo nadando




solo para verte




aquí, bajo mi puente




me quedo esperando









Al vinal volví a tropezar




con la casilla de la muerte




y no dí crédito a la suerte




por mi premio de empezar









Ya volví al inicio




y tomaré otro camino




esta vez, no ficticio




por el que mi pena vino









Igual caigo en más ocas




y avanzaré cuando me toca




no cuando quiero, porque provoca




retrasar el final, de la agónica historia.